Un bolso microscópico "más pequeño que un grano de sal" se ha subastado recientemente por 63.750 dólares (50.569 euros).
El diseño del bolso sólo puede verse con un microscopio porque el diminuto objeto es muy pequeño: mide 657 x 222 x 700 micrómetros.
El colectivo artístico que creó el bolso lo describió como "lo suficientemente estrecho como para pasar por el ojo de una aguja" y "tan pequeño que necesitarás un microscopio para verlo".
El colectivo artístico MISCHF, con sede en Brooklyn, es bien conocido por su polémica estética.
Incluyen colonia que huele a WD-40, zapatillas llenas de agua bendita, zapatos llenos de sangre humana y enormes botas de goma rojas.
Esta vez, el grupo ha optado por pasarse con la moda de los bolsos pequeños.
MSCHF escribió en un post sobre el bolso: "Hay bolsos grandes, bolsos normales y bolsos pequeños, pero ésta es la última palabra en miniaturización de bolsos".
Aunque el bolso lleva la marca del diseñador de bolsos de lujo Louis Vuitton, no está relacionado con la empresa.
Se fabricó mediante una técnica de impresión en 3D y está hecho de resina de fotopolímero, que se utiliza con frecuencia para crear estructuras y modelos mecánicos diminutos.
Según la revista Smithsonian, el equipo de la MSCHF perdió algunas de las muestras de bolsas diminutas que se enviaron a la marca para su revisión porque eran muy pequeñas cuando se estaban fabricando.
El propietario de la nueva bolsa debería, sin embargo, estar menos preocupado por la pérdida del artículo porque en la compra se incluía un microscopio digital. Las tiendas en línea venden microscopios con pantallas digitales, con precios que oscilan entre 60 y 10.000 dólares.
El coste del microscopio por sí solo no se reveló en el sitio web de la subasta. La puja inicial por el artículo era de 15.000 dólares.
Kevin Wiesner, director creativo de la MSCHF, declaró al New York Times a principios de este mes que la organización no había solicitado permiso a Louis Vuitton para utilizar el logotipo de la marca en el bolso. Declaró: "Creemos firmemente en la escuela de 'pedir perdón, no permiso'.
En 2021, la MSCHF y Nike llegaron a un acuerdo en relación con la venta de zapatillas modificadas que incluían una gota de sangre humana. En una disputa de marcas que involucra a Vans, también está apelando.
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